¿LLENAR PISCINAS?

Casi todas las piscinas se podrán llenar este verano tras el final de la emergencia por sequía
Las únicas piscinas que no podrán rellenarse son las que en este momento estén del todo vacías; el resto, tanto públicas como privadas, sí podrán abrirse
 
El levantamiento de la emergencia por sequía en la mayor parte de Catalunya abre la puerta a un nuevo verano con piscinas, como ya ocurrió en 2023. La luz roja del semáforo ya solo está encendida para algunas localidades del Alt Empordà, donde el coto a las piscinas se mantendrá (siempre con la posibilidad de que los ayuntamientos declaren refugios climáticos). En el resto de las comarcas, todas las piscinas que ya estén medio llenas, públicas y privadas, se podrán terminar de rellenar para hacerlas viables.

Según lo que reza el documento del Plan Especial de Sequía, en excepcionalidad, no se pueden llenar desde cero las piscinas particulares. Sin embargo, la norma incluye excepciones que desembocan en un nuevo verano con piscinas. Las piscinas comunitarias de vecinos, cámpings, hoteles o municipales podrán rellenarse y las privadas que solo necesiten el rellenado mínimo para funcionar, también.

Ayuntamientos y Turismo
Lo único que estará prohibido es que las piscinas particulares totalmente vacías se llenen. No obstante, como ya ocurrió en 2023, muchos ayuntamientos lo tendrán difícil para dedicar esfuerzos a supervisar quién llena su piscina y quién no.
Esta luz verde a la mayoría de piscinas alivia a los ayuntamientos, que debían encargarse de tramitar las declaraciones de refugios climáticos. Aun así, el Conseller de Acció Climàtica, David Mascort, ha destacado que es importante que las localidades tengan listo su plan de emergencia por sequía.

Los centros deportivos que tenían que compensar el gasto de agua de las piscinas o del riego podrán dejar de hacerlo.

El sector del turismo, que se estaba organizando para conseguir llenar las piscinas y que, en Lloret de Mar, se había organizado para hacerlo con agua procedente de una desalinizadora privada, también respira con la eliminación de la emergencia, que sí seguirá afectando a varios pueblos costeros (con una importante industria turística) del Alt Empordà.